EntrevistasCarta Entrevista del Presidente
Pedro Guerrero
‘Bankinter mantiene su fortaleza, a pesar de las dificultades del entorno’
¿Cómo definiría 2019 desde el punto de vista económico?
El año pasado fue un año complejo, en el que se acentuaron algunas incertidumbres que ya habían estado presentes en 2018. A escala global, las fuertes tensiones entre Estados Unidos y China volvieron a suponer un freno para el desarrollo de las transacciones comerciales, aunque se fueron suavizando a final del año. En el entorno europeo, la perspectiva de una salida desordenada de Reino Unido fue, durante 2019, una seria amenaza para la buena marcha de la economía de la Unión. En España, las principales preocupaciones tuvieron su origen en la situación de Cataluña y en la parálisis política derivada de la existencia de un Gobierno en funciones durante la mayor parte de 2019.
¿Cree que los datos del año pasado anticipan una nueva crisis?
Durante el pasado año la economía mundial ralentizó su crecimiento. En nuestro país, las cifras muestran una clara desaceleración tanto del crecimiento económico como del empleo. Pese a lo cual, no debemos olvidar que nuestra economía sigue creciendo a día de hoy más que el conjunto de la zona euro.
Sin embargo, para el año 2020, el FMI en su último informe, aun rebajando las previsiones del pasado octubre, prevé una recuperación del crecimiento mundial que pasaría del 2,9% en 2019 al 3,3% en 2020 y al 3,4% en 2021. Algunos hechos mejoran las perspectivas económicas, como son la tregua en la guerra comercial y el Brexit con acuerdo. Pero la propia institución reconoce que las nuevas previsiones tienen un alto grado de incertidumbre, con riesgos a la baja debidos, entre otras cosas, al estancamiento de los países avanzados, al resurgimiento de nuevas tensiones comerciales, esta vez entre USA y la UE, a las crecientes tensiones geopolíticas y a la agudización del malestar social en muchos países.
En mi opinión una nueva crisis en el corto plazo es poco probable, aunque no totalmente descartable, y en ningún caso sería de proporciones parecidas a la anterior.
¿Recuperará nuestra economía el ritmo que tenía?
Es difícil saberlo y sobre todo precisar cuándo. Hay circunstancias exógenas muy importantes que escapan a nuestra capacidad de control, como son las ya mencionadas de la guerra comercial, Brexit, tensiones geopolíticas que pueden afectar al precio del petróleo, etc.
Desde un punto de vista interno lo que España necesita es poder ofrecer estabilidad a los agentes económicos y facilidades a las empresas para que desempeñen su tarea y creen empleo. Los emprendedores y los inversores necesitan certezas, un marco legal que no esté sujeto a cambios continuos y un Gobierno que les aliente y que propicie el crecimiento económico.
¿Cómo valora la situación del sector financiero?
El persistente escenario de tipos de interés negativos está obligando a la banca a replantearse su negocio tradicional. Tomar dinero de unos clientes y prestárselo a otros ya no proporciona la misma rentabilidad que antes. Por supuesto, hay que preservar la actividad crediticia y pelear por los márgenes, como hemos hecho siempre. Pero ahora eso no es suficiente. El diseño de productos de mayor valor y el asesoramiento personalizado se han convertido en retos ineludibles, que traerán consigo -en realidad, están trayendo ya- una banca más innovadora, más dinámica y cercana.
Por otro lado, la transformación digital que está viviendo el mundo afectará de forma muy particular a nuestra industria.
¿Qué tal le fue a Bankinter en 2019?
Los resultados del último ejercicio los explica en detalle nuestra Consejera Delegada en las páginas siguientes. Puedo anticipar, no obstante, que Bankinter mantuvo su fortaleza, a pesar de las dificultades del entorno. Obtuvimos un beneficio neto de 551 millones de euros, que mejora en un 4,6% el registrado el año anterior. La rentabilidad sobre recursos propios se situó en el 13%, muy por encima de la media del sector. Y eso lo conseguimos sin erosionar la calidad de nuestros activos ni la solvencia. En este sentido es relevante destacar el hecho de que la agencia Moody’s elevó en 2019 todas las calificaciones de Bankinter.
Gracias a ello, puedo anunciar desde aquí a nuestros accionistas que el Consejo de Administración propondrá en la Junta General la distribución de un dividendo con cargo a 2019 de 0,0976 euros por acción, lo que supone para el conjunto del año 2019 una distribución de 263 millones de euros, la misma cifra de dividendos repartida en 2018. Creemos que se trata de una retribución adecuada a la marcha del banco y que cumple el principio de la preservación del capital, conforme a los requerimientos de los reguladores.
¿Cuáles son esos requerimientos mínimos de capital exigidos por el BCE a Bankinter para 2020?
Exactamente los mismos que en 2019: el 8,20% para el CET1, el capital de máxima calidad, y el 11,70% para el capital total. Esas exigencias son las más bajas que el Banco Central Europeo ha establecido para la banca española y Bankinter ya las superaba con creces a 31 de diciembre. No quiero dejar de añadir a este respecto algo que revela hasta qué punto las autoridades tienen en alta consideración nuestro nivel de solvencia y nuestra prudente política de riesgos. El BCE ha decidido evaluar a Bankinter a partir de ahora no todos los años, como es habitual, sino cada dos. Para nosotros es una gran satisfacción, pero también una responsabilidad.
¿Cómo ha afectado a Bankinter la puesta en marcha de la nueva Ley Hipotecaria?
La nueva ley ha supuesto un cambio importante en el procedimiento para la concesión y firma de los contratos de crédito inmobiliario. Los primeros meses desde su entrada en vigor fueron complicados para todos (clientes, entidades financieras, notarios), entre otras cosas por problemas de infraestructura, lo cual afectó al volumen de hipotecas firmadas. Tengo que decir sin embargo que en el caso de Bankinter su entrada en vigor no perjudicó el ritmo de crecimiento en la producción de hipotecas, lo cual habla bien de la agilidad y capacidad de adaptación de nuestros equipos. En todo caso, se trata de una ley que protege mucho al consumidor y que seguramente disminuirá el número de reclamaciones, cosa que es buena para todos. Dicho esto, a las instituciones financieras nos gustaría que el marco normativo, en esta y en cualquier otra materia, tuviera la suficiente estabilidad para no poner en riesgo la seguridad jurídica.
¿Qué ha supuesto la incorporación de EVO al banco?
La compra del negocio bancario de EVO y de su filial de crédito al consumo en Irlanda (Avantcard) se cerró en mayo, después de haber obtenido las pertinentes autorizaciones de los reguladores. Se trata de una operación de gran interés para el banco.
Avantcard nos permite continuar con la expansión internacional de Bankinter en un país, Irlanda, cuya economía está evolucionando muy favorablemente y fortalecer nuestro negocio de crédito al consumo. Con Avantcard sumaremos 130.000 clientes, que se añaden a los que ya tenemos en Portugal y, por supuesto, en España.
EVO tiene un enfoque innovador y distinto y será pieza clave en la estrategia digital del Banco.
¿Ha culminado la transformación digital de Bankinter?
La digitalización es un proceso continuo, que nos obliga mucho pero que ofrece y ofrecerá oportunidades en algunos casos todavía insospechadas. Ciertamente que hemos avanzado en los últimos años. A título de ejemplo puedo citar que la gran mayoría de los clientes de Bankinter se relacionan con el banco de manera digital; que la mayor parte de las transacciones del Banco se realizan digitalmente y que un 89% de los préstamos al consumo que concedemos se contratan por esa vía. De manera que mantenemos nuestra capacidad de aprovechar las nuevas tecnologías para prestar un servicio cada vez mejor.
Pero hace falta mucho más. Hay que adaptarse a un entorno social que cambia cada día más deprisa debido a la transformación tecnológica. En ese sentido tenemos una gran confianza en las capacidades que nos ofrece EVO, nuestra reciente adquisición, que desarrolla un modelo de negocio innovador y enteramente digital de acuerdo a las exigencias de la banca retail del futuro.
¿Cómo repercutirá en el accionista la salida a bolsa de Línea Directa?
Desde que adquirimos el cien por cien de Línea Directa tuvimos claro que, al tratarse de una inversión financiera del Banco, si la compañía continuaba teniendo éxito, algún día debería salir a Bolsa. Creemos que ese momento ha llegado ya por varias razones. La compañía cuenta con más de tres millones de asegurados. Opera en tres ramos: motor, hogar y salud, con gran rentabilidad y crecimiento en los dos primeros y muy buenas perspectivas en el tercero que lanzamos hace apenas dos años. El modelo de negocio de Línea Directa, basado en la distribución directa, se ha mostrado mucho más potente que el tradicional, lo cual es importantísimo en un sector que está entrando en una dinámica de profunda transformación. Y además, consideramos que el momento de mercado es bueno porque los bajos tipos de interés incrementan el apetito por empresas con potencial de crecimiento.
Planteamos la operación en la forma que creemos más beneficiosa para nuestros accionistas. Bankinter no vende en el mercado acciones de LDA, sino que las distribuye gratuitamente entre sus accionistas para que estos conserven íntegra su capacidad de disposición sobre ellas. La fórmula empleada, distribución de prima de emisión en especie, es fiscalmente neutra y el porcentaje que se distribuye es el que permite que Bankinter mantenga intacta (incluso incremente ligeramente) su ratio de capital, al tiempo que sigue siendo un accionista significativo de la Compañía con un 17,4% de participación.
Además, la separación de ambas empresas permitirá que puedan desarrollar sus estrategias de forma independiente, lo cual es muy importante en el cambiante mundo en que vivimos, que nos enfrenta a un futuro prometedor y lleno de oportunidades, pero también lleno de cambios e incertidumbre.
¿Qué significa el hecho de que Bankinter esté considerado como uno de los bancos más sostenibles del mundo por los analistas especializados?
El hecho de que Bankinter haya sido incluido dentro de los más prestigiosos índices de Sostenibilidad – Dow Jones Sustainability Index Global, FTSE4Good, CDP … - supone un reconocimiento a la extraordinaria gestión de la organización, que además de presentar unos magníficos resultados económicos, también muestra un excelente desempeño social y ambiental, además de un reconocido buen gobierno corporativo.
Estas buenas credenciales ASG (Ambientales, Sociales y de Gobernanza) que presenta el banco son cada vez más ponderadas por los inversores institucionales y los proxyadvisors , que saben reconocer las estrategias corporativas que apuestan por la creación de valor en el largo plazo.
Aunque la gestión de los aspectos de Sostenibilidad ha constituido históricamente una de las prioridades de la entidad, en 2016 se estableció la Política de Sostenibilidad, que fue el punto de partida del actual Plan de Sostenibilidad 2016-2020, que se ha denominado el Plan ‘Tres en Raya’, porque su objetivo es impulsar una triple gestión – económica, social, ambiental– alineada con el desarrollo inclusivo y sostenible al que apunta la Agenda 2030 de Naciones Unidas.
Avanzar en el buen gobierno corporativo, facilitar la inclusión y educación financiera o desarrollar una estrategia de cambio climático son algunos de los compromisos que recoge este Plan.
Así, cabe destacar que en 2019 se aprobó una nueva Estrategia de Cambio Climático, que además de reforzar los compromisos ambientales adoptados con anterioridad por la entidad para conseguir la neutralidad en carbono, aborda la gestión de los impactos indirectos, mediante la aplicación de criterios ambientales y sociales en las políticas de financiación e inversión.
Asimismo, la estrategia recoge un ambicioso objetivo para aumentar nuestra oferta de productos y servicios financieros sostenibles, y un plan para implicar a nuestros grupos de interés en una acción climática conjunta.
¿Cuál fue en 2019 la actividad de la Fundación?
Hace años que la Fundación Innovación Bankinter es un referente, no sólo en nuestro país, sino también en el ámbito internacional. No hay ninguna otra en el mundo focalizada en la innovación desde una perspectiva multidisciplinar. Sus distintos programas tienen la finalidad de facilitar el conocimiento de las consecuencias del cambio tecnológico o de las nuevas tendencias sobre las empresas y sobre la sociedad en general, a través de Future Trends Forum; fomentar el emprendimiento entre los estudiantes de los últimos cursos de la universidad con nuestra Akademia; y apoyar a las empresas en sus fases iniciales, mediante el programa Startups y en su etapa de crecimiento, gracias a Cre100do. Durante 2019, el Future Trends Forum abordó dos tendencias muy sugerentes: la Inteligencia artificial y la interacción entre Neurociencia y Tecnología. Quiero destacar también la potenciación del programa Startups, cuyo equipo se ha reforzado con la captación de talento de experiencia reconocida, que estoy seguro de que nos ayudará a optimizar el esfuerzo.
Uno de los debates recurrentes en los últimos tiempos en las empresas es el de la igualdad de género. ¿Cómo aborda Bankinter esta cuestión?
La banca ha sido tradicionalmente un sector ocupado mayoritariamente por hombres, sobre todo en los niveles directivos, pero eso afortunadamente está cambiando. En Bankinter, el 51% de la plantilla de la entidad son mujeres y en el Comité de Dirección del banco las mujeres son mayoría. Asimismo, en el Consejo de Administración la presencia femenina se sitúa por encima de la media, superando, desde hace años, la recomendación de buenas prácticas del 30%. Pero estos porcentajes se consiguen no en razón de una política de cuotas o de discriminación positiva sino por el mérito. En Bankinter a la paridad se llega por el mérito.