¿Qué es el Certificado de Eficiencia Energética?

Documentos para comprar una casa: el certificado energético

Si vamos a realizar una acción de compraventa de una vivienda, deberemos contar con un Certificado de Eficiencia Energética (CEE), un documento oficial y obligatorio que determinará sus características energéticas por un plazo de diez años. Es un documento clave a la hora de comprar una casa, exigido a partir de 2013 por el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo, para cumplir con las medidas establecidas por la Unión Europea en todos sus estados miembros.

Para emitir esta certificación, un técnico deberá inspeccionar las características constructivas y las instalaciones de la vivienda, posteriormente registrarlas en el organismo que proceda y obtener el certificado. A cada inmueble le corresponderá una letra en función del gasto energético mensual que genere; y a su vez, a cada letra le corresponderán unas ventajas o desventajas que se traducirán en un importe distinto en nuestra factura, siendo la A la más económica y la G la más cara.

• El Certificado A (verde fuerte) es la de las viviendas más eficientes, ya que generarán un gasto energético inferior al 55%.
• El Certificado B (verde oliva) sitúa el gasto energético máximo del 75%.
• El Certificado C (verde claro) es el de las viviendas con un gasto de hasta el 90%.
• El Certificado D (el amarillo, y el más habitual en nuestro país) cuenta con un gasto inferior al 100%.
• El Certificado E (naranja claro) comprende un gasto que asciende hasta el 110%, bastante mejorable.
• El Certificado F (naranja fuerte) tiene un gasto situado que no sobrepasa el 125%; y el Certificado G (el peor, y de color rojo) carece de cualquier tipo de eficiencia y precisara de una reforma, ya que tiene un consumo energético superior al 125%.

¿Cuánto cuesta un certificado energético?

Este certificado dependerá de la localización y tamaño de la vivienda, y no tiene un precio establecido por ley, por lo que cada certificador determina su tarifa. A esta deberemos sumar las tasas administrativas de cada comunidad autónoma.

¿Qué tipo de viviendas exigen un Certificado Energético?

Este certificado no es necesario en garajes, ni en trasteros, ni en edificios que vayan a someterse a una reforma o a una demolición de manera inminente. Sin embargo, es obligatorio en viviendas de nueva construcción, aunque en este caso, la calificación ya está contemplada en el propio proyecto de ejecución.

También es un documento clave para comprar una casa, venderla o alquilarla, aunque en la realidad es habitual que más de la mitad de estas viviendas no dispongan de él. Esto provoca que muchos compradores la hayan adquirido sin conocer dicha calificación. ¿La razón? El desconocimiento y el ahorro de desembolso, mayormente. Los técnicos certificadores declaran que lo habitual es que el trámite se realice después de que el anuncio se haya publicado, pero hay que tener cuidado, pues la Ley 8/2013 de rehabilitación, regeneración y renovación urbanas puede sancionar con una multa de hasta 6.000€ al vendedor que no incluya estos datos al anunciar su piso. Si vamos a recurrir a una agencia inmobiliaria para realizar nuestra compraventa o alquiler, esta nos exigirá el certificado y la etiqueta de eficiencia energética necesarios a la hora de publicar el anuncio.

En caso de vivienda de alquiler y siempre que este se haya producido tras la entrada en vigor de la ley, tendremos que entregar al inquilino una copia del certificado e incluirlo en el contrato.

En caso de compraventa, tendremos que entregarlo al comprador e incluirlo en el contrato. Resulta bastante asombroso que esta información se pase por alto, pues que una vivienda sea calificada con una u otra letra puede determinar un ahorro muy importante en cada factura mensual.

Por ejemplo, un inmueble con calificación B puede consumir 1.250€ menos al año que uno de calificación G.