Utilizamos cookies propias y de terceros para fines analíticos, estadísticos y para mostrarte publicidad personalizada en base a un perfil elaborado a partir de tus hábitos de navegación (por ejemplo, páginas visitadas). Si deseas más información puedes obtenerla haciendo clic en nuestra Política de Cookies. Puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar” o personalizar tu elección haciendo clic en CONFIGURAR O RECHAZAR SU USO.
Diccionario económico - Tipo de Interés Nominal (TIN)
Tipo de Interés Nominal (TIN)
El TIN o Tipo de Interés Nominal es un porcentaje fijo, que corresponde al importe que debes pagar al banco únicamente en concepto de intereses por el préstamo recibido, siendo un tipo de interés pactado entre cliente y entidad bancaria. El TIN es un indicador porcentual que informa de la cuantía de ganancia o beneficio que recibe el banco por prestar el dinero durante un periodo de tiempo establecido. A través del TIN, puedes comprobar, con total transparencia, el importe de los intereses que deberás abonar a la entidad financiera por operaciones como depósitos, préstamos personales o hipotecarios, en función del plazo de devolución que hayas elegido.
¿Quieres conocer todos los detalles de tu hipoteca? Pídenos una propuesta personalizada.
Ejemplo de TIN de un préstamo hipotecario
En un préstamo hipotecario el TIN mensual se obtiene sumando el euríbor al diferencial aplicado por el banco.
TIN= euríbor (-0,368% en marzo 2020) + diferencial (1,25) = 0,882% TIN.
Hay que destacar que el TIN no tiene en cuenta ningún tipo de gasto asociado a la operación de la hipoteca, únicamente es el interés que se ha acordado con la entidad financiera para realizar dicha operación. A diferencia de la TAE, el TIN no tiene por qué ser anual.
Diferencias entre TAE y TIN
Si analizamos qué es más importante de cara al consumidor, podríamos decir que probablemente la TAE, pues el TIN es un indicador meramente informativo.
La TAE, por el contrario, permite al usuario conocer el valor real del préstamo solicitado ya que incluye comisiones, interés y plazos del préstamo. La TAE proporciona una visión más clara y transparente sobre cuánto cuesta el 100% del préstamo. La TAE se puede considerar un índice realmente útil de cara al consumidor, que permite conocer, antes de aceptar el préstamo, si es rentable o no.
Asimismo, estos indicadores son utilizados por los bancos o entidades financieras como ventaja competitiva que les permite identificar y publicitar su oferta, de manera clara, a los clientes que pretenden captar.