Riesgo Reputacional

El propósito de la gestión de los riesgos reputacionales consiste en su identificación y control de manera que se reduzca su probabilidad y se mitigue su eventual impacto, para lo cual la entidad dispone de diferentes herramientas. 

El banco cuenta desde el año 2009, con un sistema de diagnóstico y medición periódico de la percepción y de las expectativas de los principales grupos de interés de la entidad. Este sistema, basado en la metodología RepTrak®, permite identificar las palancas clave de la reputación e influir de forma activa sobre lo que más preocupa. 

Uno de los aspectos más importantes para prever riesgos reputacionales es entender las tendencias del mercado y del entorno, así como lo que se dice de la entidad en los medios de comunicación y en las redes sociales. Con este fin, Bankinter dispone de un exhaustivo sistema de monitorización, análisis y  valoración de su impacto reputacional. . 

Además, con la información obtenida a través de estos informes, se ha definido un mapa de riesgos reputacionales para la priorización de los mismos. Esta priorización se realiza atendiendo a dos variables: el impacto en las percepciones de los grupos de interés y la probabilidad de ocurrencia.. 

A través del Comité de Productos de la entidad, se identifican y evalúan los posibles riesgos reputacionales con carácter previo a la comercialización de un nuevo producto o servicio. 

Periodicamente se realiza un seguimiento trimestral a través de una serie de indicadores internos y externos con impacto  reputacional, acorde a las directrices marcadas por la Autoridad Bancaria Europea. 

Por último, cabe señalar que el área de Reputación Corporativa del banco tutela un plan de gestión de crisis con el fin de establecer los canales de comunicación y los protocolos de actuación ante cualquier emergencia o crisis, en aras de proteger la reputación de la entidad y de preservar la continuidad del negocio.