¿Qué es un depósito estructurado?

Los productos estructurados son una combinación de varios productos financieros que forman una estructura única que no puede dividirse.

Este paquete está compuesto por un producto vinculado a tipos de interés y a uno o más derivados financieros. Los depósitos estructurados son un tipo de producto estructurado que combinan características de un depósito y de la renta variable.

El objetivo de los depósitos estructurados es, por un lado, asegurar el capital inicial invertido funcionando en este caso como si fuera un depósito a plazo fijo.

Por otro lado, intenta lograr una rentabilidad mayor que los depósitos, vinculando dicha rentabilidad a la evolución de un activo subyacente que puede ser:

• Valores bursátiles
• Materias primas
• Divisa

A pesar de que la inversión inicial está garantizada a su vencimiento, su rentabilidad final está ligada a los índices mencionados, esto quiere decir que es variable y por tanto, no está garantizada.

¿Qué liquidez tienen los depósitos estructurados?

La liquidez de los depósitos estructurados estará condicionada por lo establecido en el contrato ya que su liquidez no es total, al contrario de lo que ocurre con los depósitos a plazo fijo. Es importante tener en cuenta que:

En caso de querer recuperar el dinero antes del vencimiento del plazo establecido, es habitual que el valor de mercado sea inferior al importe nominal inicialmente invertido.

En este caso no existe garantía de recuperar el 100% de la cantidad invertida.

¿Qué garantías tienen los depósitos estructurados?

Los depósitos estructurados cuentan, al igual que los depósitos tradicionales, con la protección del Fondo de Garantía de Depósitos. Este fondo asegura el capital depositado hasta un máximo de 100.000€ por entidad y titular en caso de que la entidad se declare en bancarrota.