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Fondos de inversion

No hablamos de “un gran paso”, hablamos de un nuevo futuro.

Avance aeroespacial
avance_aeroespacial_superior
Categoría
Fondos de inversion
Tipo de contenido
Actualidad
Tiempo de lectura
minutos
Publicado
20 Oct 2022
Ya no hablamos de un sueño. Hablamos de una realidad en la que la tecnología aeroespacial supondrá una revolución que mejorará la vida en la Tierra desde el espacio.

¿Por qué invertir en esta tendencia?

  • Cada vez tendremos información más precisa.
    Son muchos los sectores que utilizan la información procedente del espacio: la agricultura y la minería se ven beneficiadas por el uso de maquinaria más certera. Incluso la investigación para la fabricación de órganos se está viendo favorecida por la reducción de la gravedad.
  • Mayor precisión de las previsiones y evolución del cambio climático gracias a las nuevas tecnologías.
    Un mejor control sobre sus efectos, tanto en el clima como en la atmósfera, que también permite supervisar la evolución de los bosques y la vegetación mundial con mayor acierto que desde la propia Tierra.
  • Mejora de las telecomunicaciones.
    Las empresas de la industria espacial tienen un impacto positivo en la sociedad que, gracias a su tecnología, permite comunicar de manera más sencilla aquellas poblaciones que se encuentran más aisladas, contribuyendo a reducir la brecha digital.
  • La imagen y la seguridad.
    La imágenes procedentes de los satélites son cada vez más claras, una gran herramienta en la lucha contra la delincuencia.
avance_aeroespacial
Los años 60 han quedado atrás. Hoy, ya no hablamos de carrera espacial, hablamos de una industria aeroespacial.
La actual industria aeroespacial tiene un claro carácter estratégico por su aportación a la sociedad, su capacidad de innovación y la creación de valor.:
  • Antes: Espacio 1.0
    No existían incentivos para reducir costes, el ritmo de innovación era lento, lanzamientos con un frecuencia baja y, por supuesto, sin tener en cuenta ningún tipo de criterio o compromiso medioambiental o de responsabilidad social.
  • Ahora: Espacio 2.0.
    Es el modelo actual, en donde se engloban los negocios más emprendedores y visionarios, la innovación sin límite. Negocios que, a diferencia de antaño, tienen muy en cuenta los criterios de responsabilidad ambiental, social y de gobierno corporativo.

Satélites en órbita alrededor de la Tierra.

1957 En el primer satélite de la historia, fue lanzado al espacio por la Unión Soviética. el Sputnik 1, 4.635 En satélites orbitandonuestro planeta. hubo 7.000 Desde entonces,se han lanzado satélites al espacio. 2017 357 Sólo en 2017 satélites. se lanzaron 1. 2. 1. 2. 3. 4. 3. 4.
1957 En el primer satélite de la historia, fue lanzado al espacio por la Unión Soviética. el Sputnik 1, 4.635 En satélites orbitandonuestro planeta. hubo 7.000 Desde entonces,se han lanzado al espacio. satélites 2017 357 Sólo en 2017 satélites. se lanzaron
Fuente: Spaceoneers

Mayor crecimiento, menos costes.

  • De 400.000 USD en 2021 a 2,7 billones USD en 2045.
    Hablamos de un mercado en pleno auge, con una previsión de crecimiento extraordinaria para los próximos años.
  • Más posibilidades para las empresas.
    El crecimiento de esta tendencia y la reducción de sus costes supone un aumento de la actividad, menos barreras y mayores posibilidades para las empresas.
avance-aeroespacial_inferior
El espacio, un lugar fundamental para el desarrollo de la ciencia y un fuente de nuevas tecnologías.

El universo de inversión se centra en cuatro tipos de empresas, las situadas en el espacio, las situadas entre la Tierra y el espacio, las situadas en la Tierra y, por último, empresas transversales que desarrollan tecnologías para que sea posible esta revolución:

  • Compañías dedicadas al desarrollo de tecnologías para la información (IT) y su industria.
  • Empresas que se benefician en el desarrollo de la tecnología espacial y en su aplicación a diferentes sectores, como la agricultura o la seguridad.

¿Qué opinan los expertos?

Según la Agencia Internacional e Energía, en 2030 el mundo necesitará casi un 60% más de energía respecto a 2020. Una producción de energía en la que el agua es un elemento fundamental.