Cambiar la hipoteca de banco, lo que se conoce como subrogación hipotecaria, es una operación que se realiza para mejorar las condiciones del hipotecado y que lleva gastos asociados que tiene que asumir el interesado.
Los gastos asociados a cambiar la hipoteca de banco se han ido reduciendo con el tiempo para dar una mayor facilidad a los clientes bancarios y fomentar la competencia entre las entidades.
¿Cuánto cuesta cambiar la hipoteca de banco?
En los gastos hay que distinguir los que se derivan de la cancelación de la hipoteca anterior y los que surgen de la nueva hipoteca.
Gastos de cancelación
La cancelación de la hipoteca anterior suele tener un coste que tiene que estar recogido en la escritura hipotecaria.
La comisión de subrogación la cobra el banco donde se tiene la hipoteca que se quiere cambiar.
En caso de que están previstos en la escritura de la hipoteca, el cliente tendría que asumir los costes de subrogación, que dependen de la fecha de constitución de la hipoteca y del tipo de interés que se le aplica.
Gastos de la nueva hipoteca
Además de la comisión por amortización anticipada, que puede cobrarse o no y en diferentes porcentajes según acabamos de ver, se producen otros gastos vinculados a la nueva hipoteca.
De estos gastos, la mayoría los asume el banco y el cliente solo asume la tasación de la vivienda.
Los gastos que asume el nuevo banco son: notaría, Registro, Impuesto de Actos Jurídicos Documentados, etc.
Esta reducción al mínimo de los costes que tiene que asumir el cliente junto con la facilidad los trámites cambia radicalmente el mercado hipotecario a favor del cliente.
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