Faltaban profesionales y ya existen diecisiete Cátedras Chip en las universidades españolas. Faltaba capacidad de producción y ya están en marcha los primeros proyectos para abordar algunas de las etapas del proceso productivo. El PERTE Chip es el principal destinatario de los fondos Next Generation y el gran proyecto que la industria de microelectrónica llevaba años esperando.
De los doce PERTE (Proyectos Estratégicos para la Recuperación y Transformación Económica) que articulan buen parte de los fondos europeos, el que impulsa la autonomía española en materia de microchips es el más ambicioso y el que más inyección financiera recibe: 12.250 millones de euros.
Sobre este proyecto país gira la nueva conversación que mantienen, en el marco de CFO Fórum de Bankinter, Emma Montserrat, Responsable de Fondos Europeos y Subdirectora General Adjunta en Bankinter, y Xavier Gómez, Head of Digital Transformation en FI Group, la consultora elegida por el banco para asesorar y gestionar las ayudas NextGen al tejido empresarial español. Y estos son los principales contenidos de la entrevista.
El sistema operativo del PERTE CHIP
- Se articula en torno a 4 ejes: refuerzo de I+D, estrategia de diseño, instalación de factorías y dinamización de la manufactura TIC.
- En 2023 se convocaron las primeras ayudas para I+D y para impulsar el sistema de formación de profesionales, una de las principales barreras para que la industria se desarrolle.
- Las 17 Cátedras Chip, inspiradas en el sistema de colaboración universidad-empresa, ya están en marcha en las universidades españolas con el objetivo de formar a 1.000 profesionales que a corto plazo se integren en los proyectos que nacerán de este PERTE.
- Tras esa fase inicial del PERTE, se esperaría que 2024 marcará pudiese marcar el punto de inflexión para la instalación en España de grandes fábricas de diseño, fabricación y empaquetado de microchips. Son las llamadas foundries (las que fabrican chips) y fabless (las que los diseñan).
- El Comisionado Especial del PERTE, Jaime Martorell, con una larga trayectoria en el sector tecnológico internacional, centraliza las gestiones para atraer a España a las principales industrias de Taiwán, Estados Unidos y Corea del Sur. La instalación de estas fábricas implicará la participación de buena parte del tejido TIC nacional.
- La estrategia correcta para las empresas, según Xavier Gómez, no es ir a captar fondos del PERTE como un fin en sí mismo, sino encontrar en sus convocatorias la financiación necesaria para desarrollar proyectos existentes y previstos en sus planes estratégicos. Y sin olvidar que la clave del éxito ante los NextGen es la anticipación.
- Las inversiones de las que hablamos son elevadas y requieren que haya un instrumento financiero que adelante las ayudas previstas en las convocatorias, como el que ofrece Bankinter a sus clientes, porque tardan en materializarse una vez que se ha aprobado la solicitud.
- El objetivo de la Chips Act de la UE es que Europa asuma el 10% de la fabricación mundial de microchips en 2030. Eso significa multiplicar por cuatro la actual capacidad industrial existente, y, por tanto, representa un reto enorme.
- El ecosistema de la microelectrónica en España es relativamente modesto, con unas 200 empresas y centros de investigación. Pero toda la arquitectura del PERTE va dirigida a reforzar a la industria, abordando sus retos en I+D, captación de talento y financiación.
