El dato final de IPC de la Eurozona en diciembre se sitúa en +1,1% interanual, una cifra en línea con las expectativas, que confirma el dato publicado de forma preliminar. No obstante, el registro de +1,1% sí implica una aceleración de la inflación con respecto a la tasa de +0,6% registrada en noviembre. El repunte del IPC se debe fundamentalmente a los mayores precios del crudo: la tasa mensual muestra un repunte de +0,5% frente a +0,5% estimado y -0,1% anterior, con una subida de la energía de +1,8% en tasa m/m.
La tasa interanual subyacente se sitúa en +0,9% (en línea con expectativas), lo que confirma la ausencia de presiones inflacionistas en la Eurozona. Estos datos tendrán un impacto neutral sobre el mercado, ya que están en línea con expectativas y con los datos preliminares. Además, el progresivo aumento de la inflación es coherente con las estimaciones del BCE, que prevén un IPC de +1,3% a finales de 2017.