Contratar un producto financiero remunerado no es una tarea fácil en momentos de tipos de interés cercanos a cero, ya que las rentabilidades de los productos se ajustana los tipos de interés oficiales del BCE.
¿Por qué conviene tener productos financieros remunerados?
Entre los motivos para contratar productos financieros remunerados encontramos:
El ahorro de los españoles está creciendo en los últimos meses
En Marzo se multiplicó por 10 respecto al de febrero como consecuencia de las medidas de confinamiento y por motivos de precaución frente al futuro. En estas condiciones es mejor tener el ahorro en productos remunerados.
Si la prudencia sigue siendo una guía de las decisiones de inversión en los próximos meses la alternativa más adecuada puede ser un producto financiero remunerado.
La inflación es muy baja
Con una tasa de inflación en negativo cualquier rentabilidad que se obtenga en un producto financiero debe ser incrementa por la tasa de inflación negativa.
Incertidumbre
La incertidumbre sobre los precios de otros activos que en el pasado fueron muy rentables (mercado inmobiliario, por ejemplo) puede aconsejar esperar y ver y la forma más adecuada de hacerlo es manteniendo la liquidez en un producto remunerado.
Tipos de interés en el futuro
Son muchos los economistas que apuestan por una bajada de tipos del BCE aún mayores, es decir que la tasa de las operaciones principales baje de 0% y se adentre en territorio negativo. Si esto llega a ser así en un futuro, una inversión AHORA en productos remunerados puede ser una gran ventaja adquirida que estaría vigente durante el tiempo que dure el producto remunerado si así lo estipula el contrato.
En conclusión, si ahorramos como lo estamos haciendo lo razonable es plasmarlo en un producto remunerado que deberá adaptarse a nuestros intereses, expectativas y capacidad para asumir riesgos o no.