¿Qué son exactamente el suelo y las cláusulas suelo de una hipoteca? Si tienes dudas sobre cuál era su funcionamiento, te lo explicamos en este artículo.
El suelo de las hipotecas
En las hipotecas a tipo variable, el precio que se paga depende del índice de referencia (generalmente el euríbor) y el diferencial pactado. Una cláusula suelo es un acuerdo en las hipotecas que impone un tipo de interés mínimo (suelo) cuando el euríbor está bajo. Es decir, si la suma del euríbor y el diferencial de la hipoteca está por debajo de ese umbral, se pagará el porcentaje mínimo establecido en la cláusula suelo.
Ejemplo: En una hipoteca firmada con una cláusula suelo del 3%, el cliente pagaría al banco como poco un 3% de interés, indiferentemente de cómo estuviera el euríbor a 12 meses. Si la suma del euríbor y el diferencial fuera del 1%, el cliente pagaría un 3% porque es el porcentaje mínimo establecido (suelo).
Por el contrario, si la suma del euríbor y del diferencial fuera superior a ese suelo establecido, el cliente pagará el precio contratado y no se aplicará la cláusula. En el ejemplo anterior, si la suma del euríbor y del diferencial fuera un 4%, el cliente pagaría un interés del 4% por su hipoteca.
¿Cuándo se aplicaron las cláusulas suelo en España?
El suelo de las hipotecas se empezó a aplicar por algunas entidades en España a partir de 2009, cuando el euríbor bajó de forma considerable con respecto al año anterior. Pero no todas las entidades lo hicieron, algunas como Bankinter nunca han incluido suelos en sus hipotecas.
Para saber si tu hipoteca tiene suelo, puedes revisar la escritura del préstamo hipotecario. Para ello debes mirar si en algún apartado se indica que el tipo de interés no pueda ser inferior a algún porcentaje determinado.