johnson_parlamento.jpg

Brexit: ¿Cómo afectará la suspensión del Parlamento de Johnson?


29.08.2019

Escrito por: Departamento de Análisis de Bankinter


Boris Johnson, actual Primer Ministro sobrevenido, consiguió ayer que la Reina acepte realizar su discurso de apertura del nuevo año parlamentario tras la formación del nuevo gobierno el 14 de octubre. Este hecho, que parece irrelevante, se interpreta como una pequeña victoria táctica de Boris Johnson para forzar un Brexit sin acuerdo dirigido por él mismo el 31 octubre. El Parlamento queda inactivo (sin sesiones y, por tanto, sin capacidad para actuar frente al Gobierno) durante un periodo previo al discurso de la Reina que no tiene una identificación precisa, pero que históricamente ha oscilado entre 5 y 20 días.

Análisis sobre la decisión de Johnson

Este movimiento tendrá un impacto neutral o incluso algo positivo, a pesar de que intuitivamente parezca lo contrario. En la práctica tendrá como resultado que el Parlamento reiniciará sesiones el 3 septiembre, pero solo podrá reunirse aproximadamente durante 1 semana en dicho mes porque, según el acuerdo de ayer con la Reina, el Gobierno de Johnson se ha comprometido a no iniciar antes del 9 septiembre el procedimiento para conseguir la suspensión de sesiones (es decir, lo hará ese mismo día y enseguida quedarán suspendidas).

Después del discurso de la Reina tendrá lugar un debate parlamentario que desembocará en votaciones los días 21 y 22 octubre, las cuales Boris Johnson necesitará ganar porque sin la autorización del Parlamento no podrá gobernar. 

La victoria táctica que consiguió ayer al lograr la aceptación de la Reina es que, consiga o no el apoyo del Parlamento para gobernar, habrá conseguido que las sesiones parlamentarias de octubre se limiten prácticamente a otra semana (del 23 octubre en adelante) y con eso consigue que el Parlamento no disponga casi de tiempo para debatir y articular una oposición ordenada para bloquearle: solo tendrá una semana de reuniones en septiembre y una semana en octubre.

Sin embargo, no es tan malo como parece porque, también desde una perspectiva muy práctica, Johnson fuerza al Parlamento a escoger entre su Brexit sin acuerdo (si le entrega poderes para llevarlo a cabo) y desautorizarle para gobernar (es decir, si perdiera las votaciones de los días 21/22 de octubre). Ante ese planteamiento, es muy difícil que Johnson consiga una mayoría matemática y moral para llevar adelante su plan, puesto que muchos parlamentarios de su propio partido le perciben como un autócrata imprevisible, y por eso no es fácil que “le firmen un cheque en blanco” para un asunto tan relevante como la salida de la UE.

El Parlamento tiene 650 escaños, con la siguiente distribución: 311 Tories, 247 Laboristas, 35 Nacionalistas Escoceses, 15 Partido Independiente, 14 Liberales, 10 Unionistas Irlandeses, 7 Sinn Féin, 5 The Independent Group for Change, 4 Plaid Cymru, 1 Verdes y 1 Speaker. La mayoría absoluta que necesita son 326, pero probablemente ni siquiera esa cifra le otorgaría la autoridad moral suficiente como para llevar a cabo un Brexit unilateral, que no es un asunto de segundo orden precisamente.

Es bien conocido que no pocos parlamentarios de su propio partido se oponen a sus planes (en Reino Unido. no hay disciplina de voto; cada parlamentario responde ante los electores de su circunscripción) por lo que, ni mucho menos cuenta con esos 311 tories. De hecho, la dimisión de la líder tory en Escocia, Ruth Davidson, debido a diferencias con Johnson parece inminente.

Ningún otro partido le apoya en bloque, salvo algunos unionistas irlandeses, algunos laboristas y tal vez algunos otros de forma dispersa e imprevisible. Eso hace que, en la práctica, sea realmente muy difícil que consiga la autorización "matemática" del Parlamento en las votaciones del 21/22 de octubre, y mucho menos después lo que acaba de hacer: forzar al Parlamento a escoger entre "su propio caos" (si le respalda) o algo desconocido, pero que puede volver a posponerse (si le desautoriza).

Por eso la libra ignoró absolutamente esta victoria táctica de B.Johnson ayer y se apreció (0,905/€ vs 0,912/€) en lugar de depreciarse, que sería lo que intuitivamente debería haber sucedido. Y por eso, en nuestra opinión, lo de ayer tiene una interpretación más constructiva que destructiva para el mercado, a pesar de que la primera impresión sea la contraria. Negociadores británicos y europeos retoman las conversaciones la semana próxima y ahora, sometida la parte británica a una enorme presión de tiempos, es más probable que alcancen un acuerdo que preserve el “backstop” irlandés que Johnson no tendría más remedio que aceptar y ejecutar.

Pensamos que, en todo caso, la probabilidad de un Brexit caótico se ha reducido. Veremos si acertamos porque este galimatías del Brexit, unido al irreverente actual Primer Ministro y a los sofisticados procedimientos parlamentarios británicos convierten en una tarea de alto riesgo el estimar un desenlace probable.

Artículos relacionados

¿Cómo afecta el brexit a las pensiones de los españoles en Reino Unido?

BK-167x150_cuentanomina.jpg

¡NUEVO CANAL EN TELEGRAM! Suscríbete ya y recibe en tu móvil noticias y consejos para mejorar tus finanzas.

Suscribirse

Introduzca su correo electrónico para suscribirse.

Introduzca un correo electrónico válido para suscribirse
Por favor, seleccione resumen diario o semanal
simpleCaptcha
Rellena el captcha correctamente
Por favor escribe las letras de la imagen superior.
Debe aceptar la Cláusula de Protección de Datos