PERTE de Economía Circular: “Las convocatorias para textil, plásticos, baterías y renovables van a llegar ya”.

Emma Montserrat: hola, Alba, gracias por atendernos para conocer a fondo este Proyecto Estratégico para la Recuperación y Transformación Económica (PERTE). Empezamos por lo básico, para situarnos: ¿Qué es el PERTE de Economía Circular?

Alba Sánchez: es la gran respuesta de los fondos Next Generation para poner en marcha la Estrategia Nacional de Economía Circular. En España ya hay unos objetivos establecidos de cara a 2050 para cumplir con la circularidad en el tejido productivo. Y esa estrategia arranca con mucha fuerza gracias a este PERTE, que parte con una inyección pública de 492 millones de euros que pretenden movilizar otros 1.200 millones de inversión privada.

Emma Montserrat: ha habido otros PERTE dirigidos a instituciones, consorcios o entidades públicas. ¿Quién puede participar en este PERTE?

Alba Sánchez: está enfocado mayoritariamente a la empresa privada. A empresas que tengan proyectos de Economía Circular, desde la I+D a la materialización de las inversiones para que se lleven a cabo.

Emma Montserrat: son 492 millones de euros en ayudas directas. ¿Qué es lo más destacable de este PERTE?

Alba Sánchez: cumple un amplio espectro tanto de posibles sectores que pueden ser beneficiarios de sus actuaciones como de la tipología de proyectos que se pueden financiar. Hasta ahora no había un instrumento parecido. Muchos proyectos que tenían las empresas encima de la mesa carecían de una opción tan viable para financiarse como la que ofrece el PERTE.

Emma Montserrat: una empresa que crea que tiene un proyecto susceptible de optar a los fondos, ¿qué es lo que debe tener en cuenta para poder presentarse?

Alba Sánchez: en primer lugar, hay que tener en cuenta toda la cadena de valor que forma la circularidad de cualquier producto y de cualquiera de los sectores. Si queremos pasar de un proceso lineal a una circular, obviamente, un proyecto se tiene que apoyar en quién está antes en la cadena y quién va a estar después. Qué uso se va a dar a esos residuos o cuál es el origen de esas materias primas. Con lo cual es fundamental ponerse de acuerdo con las otras piezas de tu puzle para ver si es factible realmente llevar a cabo este proyecto.

Emma Montserrat: una empresa que decida finalmente presentarse, ¿qué beneficios puede obtener de este PERTE?

Alba Sánchez: más allá de los beneficios obvios de cualquier convocatoria pública, en este caso va a tener una financiación muy atractiva porque es a fondo perdido. Y va a encontrar unos porcentajes de ayuda muy elevados. Además de los beneficios intrínsecos que se potencian con la economía circular: reducir los costes en la compra de materias primas, reducir los impactos medioambientales y reaprovechar ciertos outputs del proceso productivo por parte de otras empresas, o por la propia empresa, obteniendo así unos beneficios adicionales.

Emma Montserrat: la experiencia de los últimos meses ya nos ha aportado información de cómo funcionan los PERTE, sobre todo el del vehículo eléctrico, que ha completado el círculo de convocatoria, presentación y adjudicación. Y ha demostrado que presentarse no es sencillo. ¿En qué medida es necesario contar con un acompañamiento especializado para este PERTE?

Alba Sánchez: es muy necesario, básicamente por dos motivos. En primer lugar, es una convocatoria con un componente técnico bastante elevado, donde realmente hay que ver si la definición que dan las propias bases sobre lo que es o no un proyecto de economía circular se refleja en el proyecto de las empresas que quieren ser candidatas a esos fondos. Esto no es sencillo, hay que ver realmente si encaja o no.

En caso de que encaje, tenemos la segunda parte. Se trata de un PERTE con una dotación de casi 500 millones de euros. Es una muy buena oportunidad, la primera que tenemos en España para financiar proyectos de este tipo, pero aún así va a haber proyectos que no van a tener suficientes fondos para financiarse. Con lo cual, cuanto más se trabaje el proyecto y mejor se redacten las memorias técnicas, más probabilidades hay de tener éxito y conseguir la financiación a corto plazo.

Emma Montserrat: ¿qué otras convocatorias pueden surgir además de este PERTE?

Alba Sánchez: actualmente hay pocas oportunidades. Es la primera para financiar esta tipología de proyectos. Sí es verdad que hay algunas convocatorias europeas, pero básicamente se dirigen a financiar proyectos de I+D. Para financiar las inversiones necesarias todavía no tenemos otras oportunidades a la vista. Pero la Estrategia de Economía Circular va a seguir vigente después de Next Generation y confiamos en que se pongan en marcha nuevos mecanismos. Esperemos que el PERTE cree precedentes y sea una rueda que a partir de ahora siga girando.

Emma Montserrat: la Unión Europea se plantea revisar algunos conceptos sobre las ayudas de estado a las empresas. ¿Ha habido cambios en la normativa aplicable que le afecte a este PERTE?

Alba Sánchez: la verdad es que no, Emma, en este PERTE nos situamos con el escenario que conocíamos previamente y estamos jugando con las mismas reglas a las que estábamos acostumbrados.

Emma Montserrat: la experiencia más reciente es el PERTE del vehículo eléctrico y ha llegado a nuestras vidas un concepto nuevo que son los consorcios. ¿Va a ser necesario a partir de ahora presentarse de la mano de otras entidades o empresas a estas convocatorias y recoger de alguna manera toda la cadena de valor o no será imprescindible?

Alba Sánchez: en la mayoría de los casos yo creo que sí va a ser necesario, porque los fondos buscan el mayor impacto posible. Los organismos convocantes quieren asegurarse de que los proyectos se van a llevar a cabo y al final una empresa vive en un ecosistema, en un sector, no vive aislada. Integrarse en un consorcio es muy necesario. Puede ser que el consorcio sea el beneficiario directo de la ayuda, y tengan que ponerse varias empresas de acuerdo para la solicitud, o no, que sea una presentación individual, pero que de alguna forma deba demostrar que va a lograr ese impacto mediante acuerdos con otras empresas que irremediablemente se van a ver involucradas en algún momento de la vida del proyecto.

Emma Montserrat: ¿qué diferencias existen entre los diferentes instrumentos del PERTE?

Alba Sánchez: la principal diferencia es al sector al que están dirigidos. Lo que se ha hecho en este PERTE es lanzar una primera convocatoria transversal, que ya ha acabado, para proyectos de cualquier sector, que estaba dotada con 192 millones de euros. Pero en el segundo eje, dotado con 300 millones de euros, se quiere fomentar sectores muy específicos donde se han detectado unos retos tecnológicos concretos para los cuales se han reservado dotaciones específicas con sus propias convocatorias.

Vamos a tener en breve, en 2023, convocatorias específicas para el ámbito textil, para los plásticos, para el reciclaje de las baterías del vehículo eléctrico y para el sector de bienes de equipo del energético, la industria que fabrica paneles solares y aerogeneradores.

Emma Montserrat: ¿cuáles son los principales objetivos alineados con el plan europeo para la Economía Circular que se persiguen con este PERTE?

Alba Sánchez: en todas las líneas del PERTE, independientemente del sector al que se dirijan, se persiguen 4 objetivos principales: la reducción del empleo de materias primas, el ecodiseño, el tratamiento de los residuos que se generen a lo largo de la cadena productiva y, por último, la digitalización, para permitir una mejor trazabilidad del residuo a lo largo de toda la cadena de valor.

Emma Montserrat: ¿cuál es el grado de madurez que deben tener los proyectos para presentarse al PERTE? ¿Va dirigido a proyectos de I+D por ejemplo?

Alba Sánchez: Los proyectos de economía circular tienen que ser muy maduros. La ventaja de estas convocatorias es que te permiten llevar a cabo algunas actuaciones de I+D que todavía son necesarias, porque hay ciertos procesos donde todavía carecemos de la solución tecnológica adecuada, pero que inevitablemente van a acabar en una implantación: deben estar muy muy cercanos al mercado.

Emma Montserrat: ¿cómo deberían afrontar las empresas las próximas convocatorias sectoriales que se van a producir en torno al PERTE de la Economía Circular?

Alba Sánchez: básicamente deberían centrarse en identificar tanto la parte inicial del proceso productivo, para ver dónde hay posibles proyectos para reducir las materias primas o mejorar el ecodiseño, digamos, de los inputs del proceso, identificar si es posible realizar algunas mejoras, si ya hay proyectos con un presupuesto importante que se quieran llevar a cabo durante los próximos años. Y por otro lado también ir a la otra cara de la moneda: a los residuos. Analizar qué residuos se están generando, si realmente hay un potencial para reutilizar, reciclar y darle una segunda vida en algunos casos.

Emma Montserrat: por último, ¿para cuándo se esperan los próximos instrumentos?

Alba Sánchez: los esperamos en breve. Ha habido ciertos retrasos, pero durante el primer trimestre de 2023, para el primer semestre máximo, se van a poner en marcha todas las líneas sectoriales: textil, plástico, energías renovables y reciclaje de baterías. Van a venir ya.